El Papa Francisco pidió hoy, en Indonesia, que la Iglesia se caracterice por el respeto y la atención a todos, promoviendo la "fraternidad" en un país marcado por la diversidad de pueblos y tradiciones.
"Anunciar el Evangelio no significa imponer ni oponer la propia fe a la de los demás, no significa hacer proselitismo, sino dar y compartir la alegría del encuentro con Cristo, siempre con gran respeto y afecto fraterno para todos", dijo, en un encuentro con miembros del clero, institutos religiosos y diversas comunidades católicas del archipiélago, que tuvo lugar en la catedral de Nuestra Señora de la Asunción, sede de la arquidiócesis de Yakarta.
"Los invito a seguir siempre así, abiertos y amigos de todos", añadió.
Francisco fue recibido por el arzobispo local, el cardenal Ignatius Suharyo Hardjoatmodjo, y por monseñor Antonius Subianto Bunyamin, presidente de la Conferencia Episcopal de Indonesia (CEI).
En su intervención, el pontífice destacó la "apertura" de la Iglesia católica en el archipiélago, en relación a "las diversas realidades que la componen y la rodean, a nivel cultural, étnico, social y religioso".
"Vivir la fraternidad significa acogernos unos a otros, reconocernos iguales en la diversidad", destacó.
El Santo Padre agradeció además a los representantes de la Iglesia católica que presentaron su testimonio, subrayando que "cada uno tiene su propia misión para hacer crecer el Pueblo de Dios".
"Todos, todos, todos, todos", subrayó, en alusión a los "puentes" que existen entre las distintas islas del país.
Francisco habló en italiano, acompañado por un sacerdote que tradujo para la asamblea, invitando a los presentes a vivir "la relación con la creación y con nuestros hermanos, especialmente los más necesitados, en un estilo de vida personal y comunitario marcado por el respeto, el civismo y la humanidad, con sobriedad y caridad franciscanas".
De mismo modo, el Obispo de Roma advirtió sobre la ilusión de quienes buscan "seguridad", destacando que la compasión implica "acercarse unos a otros", "abrazar y acompañar" a quienes sufren, con su deseo de justicia.
"Los animo a continuar su misión: fuertes en la fe, abiertos a todos en fraternidad y cercanos a cada uno en la compasión. Fuertes, abiertos y cercanos", concluyó.
Monseñor Bunyamin, obispo de Bandung y presidente de la CEI, destacó por su parte la diversidad del país, con alrededor de 1.300 etnias y pueblos, esperando que la visita del Papa contribuye a construir "una verdadera fraternidad, que se manifiesta a través de una actitud de compasión, especialmente hacia aquellos que están al margen de la sociedad".
Al finalizar el encuentro, tras la bendición, el Papa se dirigió a la plaza de María, junto a la Catedral, para bendecir a los presentes.
Indonesia, el país con mayor número de musulmanes del mundo, cuenta con alrededor de 8,3 millones de católicos, que representan el 3% de la población, según datos del Vaticano.
Francisco es el tercer pontífice que visita el archipiélago, después de san Pablo VI en 1970 y san Juan Pablo II en 1989.
FUENTE: aica.org