"Cuando uno tiene ganas ya tenes medio camino hecho" dijo Ana Giraudo por LT9

Con motivo de celebrarse ayer en el mundo el día del "Voluntariado", Gustavo Galoppo dialogó con Ana sobre su experiencia de volunataria . "En plena pandemia - dijo- sentí que tenía que hacer algo por la gente, entonces me puse a hacer los cursos de voluntario de la Cruz Roja. Había una propuesta de dos cursos pero hice como diez, y pude tener el certificado de voluntario activo. Así empecé a brindar desde mi profesión de psicopedagoga escucha y consejos a personas de la tercera edad por vía telefónica, y la verdad que sentí que hacía algo importante por abuelos solos y muchas veces desesperados, además del asilamiento por la pandemia que padecían".

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"Por cuadriplejia no puedo mover mis brazos y mis piernas"

   Ana Giraudo contó en Aires del Interior su dificultad motriz que aún le da más valor a su testimonio de vida. "Yo tuve un accidente y me quedé con la imposibilidad casi total de mover mis brazos y mis piernas, así que no podía ser voluntaria para hacer los mandados como lo pedía mucha gente, pero entendí que desde la escucha y la palabra podía ayudar".

   "A través de un convenio, donde participó la Universidad Católica de Santa Fe y el municipio local, fuimos casi 250 voluntarios formados por Cruz Roja  que trabajamos en pandemia, ninguno en mi situación motriz, pero todos cada uno en lo suyo".

   "Siento que hicimos el aporte de nuestra gota en al mar con nuestro voluntariado, -aseguró por LT9- y aún sigo ayudando a una abuela de 99 años y les aseguro que es mucho más lo que uno recibe que lo que da uno".

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