El Papa Francisco se reunió, a puerta cerrada, con un grupo de sacerdotes jóvenes de Roma, a quienes dejó un mensaje de apoyo y consejo para su misión. "No se sale solo de una crisis", afirmó el Santo Padre, citado en una nota de la sala de prensa de la Santa Sede.
Según el Vaticano, el Papa compartió reflexiones sobre la vida de la diócesis de Roma, “sobre su desarrollo, sobre su belleza, sobre algunas debilidades”, llamando al diálogo y a la valoración del proceso sinodal en curso, advirtiendo sobre “el riesgo de reducir convertirlo en un lema en lugar de vivirlo como una forma de vivir la Iglesia”.
El encuentro, organizado por las Pías Discípulas del Divino Maestro, una orden de hermanas religiosas, que le prodigaron al Santo Padre una afectuosa bienvenida, reunió a 90 sacerdotes de la diócesis de Roma con menos de diez años de ordenación; El 14 de mayo, Francisco cumplió más de 40 años con los sacerdotes ordenados.
La Santa Sede afirmó que el encuentro, en la tarde del miércoles 29 de mayo, ha valorado “la experiencia de los primeros años de sacerdocio, el feliz descubrimiento de la fe del pueblo, pero también el desafío del contacto y del servicio a los enfermos, al que debemos responder con cercanía, la compasión, la ternura y las crisis que enfrenta la vida sacerdotal”.
Otros temas tratados fueron “la soledad en la ciudad, la proximidad, la paternidad, las relaciones difíciles”, y el pontífice destacó “la importancia de estar cerca de los mayores”.
Los sacerdotes presentes saludaron personalmente al Papa, y Francisco dejó un mensaje privado para un sacerdote birmano: “Rezo siempre por Myanmar y te envío una bendición especial”.
Desde septiembre de 2023 hasta principios de mayo, el Obispo de Roma realizó un recorrido por las distintas prefecturas de su diócesis para encontrarse con párrocos y prefectos y escuchar de ellos los desafíos, dificultades, bellezas y gratificaciones de su trabajo.
Esto es algo que –y es el propio Papa quien lo ha repetido en varias ocasiones– “siempre es muy bueno para un obispo”.
FUENTE: aica.org